Método Montessori: qué es y cómo aplicarlo en la educación

9 mayo 2024

En el mundo de la educación, el método Montessori ha ganado reconocimiento por su enfoque innovador y centrado en el desarrollo integral de los niños. Sin embargo, muchas veces no se entiende qué es realmente la educación Montessori y cómo puede transformar el aprendizaje de las nuevas generaciones. En este artículo exploraremos a fondo la pedagogía Montessori, desde sus principios fundamentales, los materiales Montessori y las escuelas Montessori hasta cómo esta educación alternativa puede impactar positivamente el desarrollo de las nuevas generaciones para contrubuir a un mundo más libre y amoroso.

¿Qué es el método Montessori?

La educación Montessori recibe su nombre de la médica y pedagoga italiana Maria Montessori, que desarrolló este método a principios del siglo XX. Este tipo de pedagogía se centra en el respeto hacia el niño, teniendo en cuenta que es un individuo único y que se debe potenciar su desarrollo como ser humano. El método Montessori también se caracteriza por un enfoque centrado en las necesidades reales del niño, en lugar de lo que los adultos creen que el niño necesita. También se usan materiales educativos específicos y un ambiente concreto que promueven el aprendizaje autónomo, con el objetivo de que la educación sea una vía para la independencia del infante.

Principios fundamentales del método Montessori

Hay diversos principios del método Montessori que subyacen a todas sus prácticas y estrategias, con el objetivo de proporcionar al infante un desarrollo integral a nivel cognitivo, psicológico y corporal.

Principio de la libertad

El método Montessori reconoce la importancia de la libertad para que el niño explore y descubra el mundo a su propio ritmo. Entiende que el niño necesita espacio para expresar sus necesidades y sus habilidades innatas. Evidentemente, combinado con la libertad, se le conduce para que también sea responsable de sus palabras y acciones, consiguiendo que el niño adquiera un respeto hacia sí mismo, los demás y el entorno.

Aprender haciendo

Una de las grandes diferencias entre el método Montessori y la educación convencional es la forma de aprendizaje. En la educación Montessori se utiliza el aprendizaje activo a través de la manipulación de materiales concretos. Dichos materiales están diseñados para estimular los sentidos de los niños, así como para promover la exploración y el descubrimiento. Gracias a ello, el niño aprende no sólo a nivel mental, sino que practica constantemente, utilizando sus manos y su mente al mismo tiempo, lo cual ya se ha demostrado que es mucho más efectivo ya que implica a más partes del cerebro.

Principio de la individualidad

Cada niño es diferente, y por eso tiene sus propias necesidades, intereses y ritmo de desarrollo. La pedagogía Montessori reconoce esta individualidad y promueve las diferencias, permitiendo que cada niño avance según su propio ritmo y no tenga que comparar su proceso educativo con los otros niños. En este sentido, este método es individualizado, en lugar de estandarizado como en la educación convencional.

Principio de la preparación del ambiente

El método Montessori tiene en cuenta el contexto en el cual se desarrolla el niño. El ambiente en el que se desenvuelve el niño juega un papel crucial en su desarrollo. En las escuelas que siguen la pedagogía Montessori, se genera un entorno cuidadosamente preparado para estimular el aprendizaje, la concentración y la autonomía de cada uno de los alumnos.

Principio del rol del educador

En el método Montessori, el educador actúa como un acompañante, guía y facilitadordel aprendizaje. Su función es la de observar a cada niño para comprender las necesidades individuales de cada uno. Una vez ha logrado ver las cualidades y necesidades de cada niño, su labor consiste en proporcionar el apoyo y la orientación adecuados en sus procesos de desarrollo, sirviendo como apoyo en el prcoeso de cada niño.

Principio de la comunidad

Aunque el proceso educativo es individualizado, en el método Montessori se hace mucho hincapié en la comunidad. La colaboración y el respeto mutuo son valores fundamentales en la educación Montessori. Se fomenta que los niños aprendan a trabajar juntos y a cooperar, a resolver conflictos de manera pacífica y a valorar la complementariedad y la colaboración por encima de la competencia.

Principio de la naturaleza

La conexión con la naturaleza y el respeto por el medio ambiente son aspectos importantes en la pedagogía Montessori. En este sentido, se promueve el aprendizaje al aire libre, mucho más natural que las cárceles en las que se encuentras los niños educados desde la educación industrial. Por este motivo, se integran actividades relacionadas con la naturaleza en el currículo educativo, fomentando así una conexión con la naturaleza desde temprana edad.

Características del método Montessori

La educación Montessori se caracteriza por varias características distintivas que la hacen única en comparación con otros enfoques educativos convencionales:

Ambiente preparado: en el método Montessori el ambiente está diseñado especialmente para fomentar el aprendizaje, la autonomía, la curiosidad, la exploración y el juego. Es un ambiente que favorece la expresividad de cada niño y la interacción con elementos del entorno.
Materiales Montessori: los materiales utilizados en el método Montessori están específicamente diseñados para estimular todos los sentidos de los niños, desde la vista hasta el tacto. Esto permite a los niños despertar sus potencialidades.
Educación integral: el método Montessori enfatiza el desarrollo social, emocional y moral de los niños, promoviendo valores como la empatía, la responsabilidad y el respeto. El aprendizaje académico es importante, pero no se considera esencial como los otros tipos de aprendizaje para el desarrollo del individuo.
Educación individualizada: en el método Montessori, cada niño recibe atención individualizada. No se juzga a los niños según el mismo patrón, sino que se le permite avanzar según su propio ritmo y estilo de aprendizaje. De esta forma, el niño no se compara y aprende a cultivar su potencial, así como trabajar sus defectos.
Autoevaluación y corrección: el método Montessori fomenta la autoevaluación y la auto-corrección para fomentar la responsabilidad personal. Así, los niños aumentan su autoestima y su autoconfianza, y comprenden desde bien pequeños que ellos tienen las riendas de su aprendizaje.
Periodos sensibles: la pedagogía Montessori reconoce que los niños no son piedras, sino que pueden pasar por momentos de debilidad y de perturbación emocional. En este sentido, se está muy atento a los comportamientos de los niños para que estos momentos no pasen indavertidos. Además, los educadores Montessori saben cómo aprovechar estos periodos sensibles para proporcionar experiencias de aprendizaje óptimas y significativas.

Beneficios del método Montessori para los niños

El método Montessori ofrece una amplia gama de beneficios para el desarrollo integral de los niños.

Desarrollo intelectual

Fomenta la curiosidad y el amor por la sabiduría, promoviendo un aprendizaje autónomo y significativo, basado en el interés natural y la pasión de los niños.
Estimula el pensamiento crítico y la resolución de problemas, y de esta forma desarrollan habilidades cognitivas clave como la concentración, la memoria y el razonamiento lógico.

Desarrollo social y emocional

Favorece la colaboración y el trabajo en equipo. Ayuda a los niños a desarrollar habilidades de trabajo en equipo, como la comunicación asertiva, la empatía y la cooperación.
Promueve la autoestima y la confianza en los niños, ya que brinda un ambiente de apoyo y aceptación donde los niños se sienten valorados y respetados.

Desarrollo de la independencia y la autonomía

Capacita a los niños para que sean autónomos y responsables de su propio aprendizaje, fomentando así la auto-disciplina, la autorregulación y la toma de decisiones informadas. De esta manera, promueve la soberanía personal en los niños, con lo que dejan de considerarse víctimas de los demás ni delegan su responsabilidad.
Cultiva habilidades prácticas para la vida cotidiana, preparando a los niños para enfrentar los desafíos del mundo real y a sentirse útiles en el día a día.

¿Cómo aplicar la educación Montessori en clase/casa?

Para aplicar la pedagogía Montessori de manera efectiva, ya sea en un entorno escolar o en el hogar, es importante tener en cuenta algunas herramientas y principios clave:

Crear un ambiente preparado: es importante diseñar un espacio ordenado, atractivo para los ojos de los niños y, a la vez, seguro. Además, debe contar con materiales educativos Montessori adecuados y accesibles para los niños.
Seguir los intereses del niño: hay que dejar espacio al niño para elegir sus actividades y seguir su curiosidad natural. Según los intereses del niño, se adapta el entorno y las actividades según sus necesidades particulares.
Fomentar la independencia: el método Montessori permite proporcionar oportunidades para que los niños realicen tareas de forma autónoma y tomen sus propias decisiones, permitiéndoles asumir responsabilidades y aprender de sus propias experiencias.
Ofrecer libertad con límites: hay que stablecer reglas claras y expectativas para proporcionar seguridad a los niños, pero a la vez hay que permitir que los niños exploren y experimenten dentro de esos límites, brindando un equilibrio entre la libertad y la seguridad.
Proporcionar materiales Montessori adecuados: es importante tilizar materiales educativos Montessori específicamente diseñados para promover el aprendizaje activo y la exploración sensorial. Permitiendo a los niños manipular y experimentar con los materiales, les permite construir su propio conocimiento.
Fomentar el aprendizaje autónomo: hay que promover la autoevaluación y la auto-corrección, para que los niños aprendan de manera natural, no por el miedo al castigo. De esta manera, van desarrollando la confianza en sus habilidades y la capacidad de aprendizaje independiente.
Crear un ambiente de apoyo: es crucial brindar apoyo emocional y académico a los niños, alentando el crecimiento de los niños. La claves es celebrar los logros de los niños, creando un ambiente de confianza y seguridad donde se sientan valorados y motivados para aprender.

Ideas para aplicar la educación Montessori en cada etapa

En cada una de las etapas del proceso educativo, los niños tienen diferentes necesidades. Vamos a explorar los pasos más importantes dentro de cada etapa.

Montessori de 0 a 3 años

Crear un ambiente sensorial: es importante proporcionar materiales sensoriales Montessori que estimulen los sentidos y fomenten la exploración y el descubrimiento, como móviles de Munari o cestas de tesoros.
Fomentar el movimiento libre: es clave permitir que los niños se muevan libremente y exploren su entorno de manera segura, proporcionando espacio y materiales para gatear, caminar y trepar.
Involucrar en actividades cotidianas: hay que invitar a los niños a participar en actividades prácticas de la vida diaria, como preparar alimentos, vestirse y limpiar, fomentando así la independencia y la autonomía. Es un reto para los adultos, pero los niños sorprenden con su capacidad de aprendizaje.

Montessori de 3 a 6 años

Introducir actividades prácticas: en esta etapa es crucial presentar actividades prácticas de la vida diaria, como verter líquidos, clasificar objetos y trabajar con materiales de lenguaje y matemáticas Montessori.
Fomentar la exploración: es importante proporcionar oportunidades para que los niños exploren y manipulen materiales Montessori, como el cubo del binomio, el trinomio y el cuadrado de la suma, fomentando así el aprendizaje activo y la comprensión conceptual.
Promover la colaboración: Invitar a los niños a trabajar juntos en proyectos grupales, como la creación de un jardín comunitario o la construcción de una maqueta, fomentando así el trabajo en equipo y la cooperación.

Montessori de 6 a 12 años

Ofrecer oportunidades de investigación: Proporcionar recursos y materiales para que los niños realicen investigaciones independientes sobre temas de su interés, fomentando así la curiosidad y la indagación.
Fomentar la autodisciplina: Invitar a los niños a establecer metas personales y a seguir un plan de trabajo autodirigido, enseñándoles habilidades de organización y gestión del tiempo.
Incorporar aprendizaje práctico: Integrar actividades prácticas y experiencias de aprendizaje del mundo real, como excursiones al aire libre, visitas a museos y proyectos de servicio comunitario, enriqueciendo así el currículo educativo y fomentando la conexión con el mundo que les rodea.

Conclusiones

La educación Montessori ofrece un enfoque único y eficaz para el desarrollo integral de los niños, centrándose en el respeto hacia el niño como individuo y promoviendo la autonomía y el aprendizaje activo. Desde Kuestiona creemos que el método Montessori es clave para cambiar la educación, y la utilizamos dentro del Máster en Educación Consciente, una formación para educadores y pedagogos que quieren formar parte de la revolución educativa.